En mi último artículo, exploré algunas razones por las cuáles pienso que los emprendedores deben darse a conocer. En mi experiencia como emprendedor, he visto que ser protagonista, en convertirse en la estrella de rock, tiene muchos beneficios. Yo he experimentado esto de primera mano, sin embargo estoy convencido que hacer esto no solo es benéfico para emprendedores, sino para todo tipo de personas. Por ejemplo, una persona que trabaja para una empresa, seguro tendrá beneficios si se da a conocer.
Existen muchas empresas nativas de Internet, pero también existen muchas otras empresas que nacieron en el mundo físico y han tenido que migrar hacia este nuevo medio. Las primeras que menciono por lo general han realizado grandes esfuerzos en este medio teniendo en cuenta que se crearon para existir en este y que la única forma en la que pueden hacer negocios es de esta manera. Sin embargo suele ocurrir de una forma diferente cuando se trata del segundo tipo de empresas que menciono, dado que estas nacieron fue para existir en el mundo físico, pero con el tiempo han migrado a Internet creyendo que aquí podrán expandir sus negocios.
Hace unos días estaba viendo la primera y segunda temporada de Silicon Valley, la serie de HBO (muy recomendada para todos los emprendedores). Más allá de su humor, me llamó la atención la forma cómo está conformada el equipo, que no dista tanto de lo que usualmente vemos en la vida real. Hay un líder fuerte (el “macho alfa”), hablador, entrador y más. Hay otro líder suave, tímido, introvertido y que no es bueno hablando. Otras personas los acompañan, en su mayoría con grandes conocimientos técnicos, pero con pocas habilidades sociales.
Como emprendedores siempre estamos en la búsqueda de establecer un proyecto laboral, que al final se convierte en nuestro proyecto de vida. Muchas de nuestras ilusiones empiezan a girar sobre este proyecto, razón por la cual esperamos que este salga de la mejor manera posible. Sin embargo debemos recordar que por lo general buena parte del éxito del proyecto recae en las manos de otras personas, que tienen diferentes sueños y motivaciones.
Hacer que todo funcione de la manera correcta depende en gran medida de que estas otras personas funcionen en correcta sintonía con nosotros y busquen realizar las cosas de la mejor manera. Es por esta razón que es de vital importancia lograr una excelente comunicación con todas las personas que trabajan a nuestro lado para que así nosotros mismos podamos conseguir nuestros sueños.
En los últimos años, los denominados “Waerables” se han convertido en una tendencia a nivel mundial y cada vez más personas los utilizan. Muchos expertos en la materia pronostican que estos dispositivos serán una industria multimillonaria en el futuro. De hecho, hay muchos emprendedores trabajando en productos de esta categoría, esperando que sean el próximo dispositivo de moda.
Pero más allá de que hay muchos emprendedores trabajando en tecnologías de Wearables, quería analizar cómo estos aparatos pueden ser parte de la vida de los emprendedores. En otras palabras, quería analizar si verdaderamente dispositivos de este estilo pueden ayudar a los emprendedores, como herramienta de trabajo y que por ejemplo, otros aparatos no lo puedan hacer.
Esta es mi última publicación del seriado que dedico a errores que con frecuencia los jefes cometemos. Durante las últimas once publicaciones he mencionado varios errores que los jefes cometen y en muchas ocasiones sin siquiera darse cuenta de las implicaciones que esto tiene para su personal y para la empresa. Los que he mencionado son los siguientes:no propiciar un buen ambiente de trabajo, corregir de manera errónea a los empleados, no tener la capacidad de delegar, tener personas indispensables en su equipo, no escuchar a nuestro equipo de trabajo, no dar ejemplo, no tomar decisiones, no propiciar el crecimiento de su equipo, no promover la disciplina, tener analistas que sólo ejecutan y creer que como jefes siempre tenemos la razón. Lo invito como lector a que lea estas publicaciones pues analizo cada uno de estos y hago reflexiones sobre los que ocurre cuando los cometemos.
A principios de la década del 2000, yo creé mi primer negocio con unos compañeros de la universidad. Nuestra idea de negocio era grande (o al menos, eso creíamos) y requería un apoyo económico importante. En aquella época, encontrar inversionistas en nuestro país (Colombia) era muy complejo. Hoy esto ha mejorado, sin embargo esa complejidad me hizo entender varias cosas. Una de las principales, es que con la globalización, si no se encuentra el capital localmente, es posible que en otros países si se encuentre.
Otra vez escribo una nueva entrega para este seriado que he dedicado a errores que con frecuencia los jefes cometen. Esta es mi onceava publicación y pronto finalizará este seriado. Antes de seguir lo invito a leer sobre otros errores comunes que se cometen cuando tenemos gente a cargo:no propiciar un buen ambiente de trabajo, corregir de manera errónea a los empleados, no tener la capacidad de delegar, tener personas indispensables en su equipo, no escuchar a nuestro equipo de trabajo, no dar ejemplo, no tomar decisiones, no propiciar el crecimiento de su equipo, no promover la disciplina y tener analistas que sólo ejecutan. Hoy hablaré de un tema relacionado con el error que ya mencioné sobre no escuchar a nuestro equipo, pero con un agravante y es creer que cómo jefes siempre tenemos la razón.
El Blog Un Emprendedor, que actualmente pertenece a mi firma consultora, Consultorías 360°, es un proyecto que empezó a mediados del año 2009. Es decir que al momento de escribir estas líneas, el Blog acaba de cumplir 6 años de vida. Durante este tiempo he compartido parte de mis conocimientos, errores que cometí (para que otros los eviten), así como elementos que han sido positivos, entre muchos otros. Actualmente mi hermana María Fernanda Gómez también escribe para este Blog.
En múltiples artículos he hablado sobre “mi empresa”, esa que cree hace más de 10 años y la cual finalmente se quebró y perdí mucho dinero (que todavía estoy pagando). Pocas veces he entrado en los detalles de aventura emprendedora y sé que muchas personas me han preguntado sobre la misma. Hace varios años quería escribir un poco sobre esta empresa, inicialmente en forma de video, pero bueno, finalmente hoy escribiré un poco sobre esta y lo qué sucedió. No compartiré nombres ni otra información, que ni pone ni quita.
Esta es una de las últimas publicaciones que realizo con respecto a errores que en ocasiones los jefes cometen. Entre estos hemos venido avanzando por los siguientes:no propiciar un buen ambiente de trabajo, corregir de manera errónea a los empleados, no tener la capacidad de delegar, tener personas indispensables en su equipo, no escuchar a nuestro equipo de trabajo, no dar ejemplo, no tomar decisiones, no propiciar el crecimiento de su equipo y no promover la disciplina. En esta publicación hablaré de un error, que muchas veces ocurre en empresas con grupos de trabajo grandes y con diferentes niveles, que es tener analistas que sólo ejecutan y no se dediquen a analizar.