Emprendedores con y sin ánimo de lucro

Existen muchos tipos de emprendedores (y de emprendimientos), que hace difícil crear categorías que los distingan o agrupen. Sin embargo, dentro del gran mundo de emprendedores, si es posible identificar 2 grandes categorías. Por un lado esta el emprendedor que crea su proyecto para generar dinero a nivel personal, como sustento. En otro extremo, está el emprendimiento social, que de entrada no busca hacerse rico financieramente, sino que su objetivo principal es ayudar a la comunidad.

En la anterior definición es importante aclarar que el emprendedor con ánimo de lucro puede estar ayudando a la sociedad, aunque este probablemente no sea su primer interés. De la misma forma el emprendedor social puede que con este haga dinero, pero nuevamente esta suele ser una necesidad secundaria.

Con las anteriores condiciones, quiero explorar cómo podemos ser los dos tipos de emprendedores y obtener beneficios de las dos actividades. En mi caso personal, yo inicié mi ruta emprendedora en el mundo del ánimo de lucro. En este inicio, mi objetivo principal era crear una forma de trabajo y de sustento, que me sirviera por muchos años. Creía que con este podía ayudar a muchas personas, empezando por mis empleados y clientes, pero esto era algo secundario. La verdad es que la creación de mi emprendimiento lo realicé inicialmente por razones económicas y de crecimiento personal.

Durante este primer gran emprendimiento se me presentó la oportunidad de participar de un emprendimiento social. Este me llamó mucho la atención, pues era un complemento a lo que hacía en mi otro emprendimiento. Así que me uní al mismo y tuve la oportunidad de explorar otra faceta, hacer cosas diferentes, ayudar a unas poblaciones más grandes e igual que con mi primer emprendimiento, crecí mucho como persona.

En este momento han pasado varios años desde que inicié mi primer emprendimiento y de cuándo comencé en el emprendimiento social. Mi primer emprendimiento ya no existe y actualmente estoy en otro proyecto, que incluye entre otros elementos, Consultorías en Estrategias de Internet y este Blog. Del emprendimiento social me retiré hace algunos meses, por falta de tiempo y por qué considero que ya cumplí un ciclo. A pesar de lo anterior, más adelante seguro participaré de otro u otros emprendimientos sociales que para mi sean un reto y me ayude a crecer aún más como persona.

Estos dos tipos de emprendimientos son diferentes y tiene rasgos muy marcados. Sin embargo también tienen elementos similares. No todas las personas estarán cómodas en estos emprendimientos. Por ejemplo, he visto personas que no les gusta el emprendimiento con ánimo de lucro, pero que les va muy bien en el social. De la misma forma he visto amigos emprendedores que no soportan el emprendimiento social.

Si a mi me preguntaran cual recomiendo, diría sin dudarlo que los dos. Son diferentes, pero como ya dije complementarios. Muchas de las cosas que aprendí en el emprendimiento social lo he capitalizado con creces en mis empresas. He estado en estos por razones completamente opuestas, pero sin desearlo se han mezclado y me han beneficiado.

Así que la anterior es una revisión de las dos caras de esta muy interesante moneda. Lo invito a explorar estas 2 facetas y si definitivamente le gusta una más que la otra, lo ideal es explorarla al máximo.

Imagen tomada de Flickr.com

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