Todos hemos conocido personas, en caso de que no sea usted quien se ajusta a esta descripción, que son adictos al trabajo. En inglés los suelen llamar workaholics, en un derivación de las palabras trabajo (work) y alcohólicos (aholics). Son personas que por una u otra razón trabajan muchas horas al día, poco o nada descansan los fines de semanas y en vacaciones también están trabajando. Algunos lo hacen por que aman su trabajo, otros por convicción y otros más por necesidad.
Puede ser muy positivo ser un buen trabajador, amar lo que uno hace y dedicarle un tiempo interesante a esta labor. Sin embargo, los extremos suelen son nocivos. En esta serie de artículos, en el cual abordo el equilibrio en los diferentes aspectos de la vida, es importante buscar el equilibrio. En este orden de ideas, es muy importante entender que no todo puede ser trabajo.