Como el título de este Blog, yo me defino como Un Emprendedor. Pero antes de ser un emprendedor, fui un soñador y lo sigo siendo. Así que quizás la definición más certera de quien soy sea «soy un soñador que con el tiempo me convertí en un emprendedor». Y la verdad sea dicha, es que amo esta descripción, pues tanto ser soñador como emprendedor son dos aspectos de mi vida que me fascinan y me apasionan.
En mis 28 años de vida he conocido un buen número de emprendedores, incluyendo muchos empresarios exitosos. De una forma u otra veo que el emprendedor es un soñador o en algún momento lo ha sido. Casi que me atrevería a decir que ser soñador es un prerrequisito para ser emprendedor y que estas dos palabras están muy relacionadas (no son sinónimos, pero están cerca). Y es que el emprendedor es una persona que crea, que genera proyectos, que planifica como los va a sacar adelante y todo esto requiere de un sueño.
¿Por qué Dejamos de Soñar?
Lastimosamente muchas veces dejamos de soñar. A veces lo hacemos por un periodo de tiempo, por un momento de nuestra vida. En otras ocasiones los sueños desaparecen del todo, porque hemos llegado a un momento de la vida donde creemos que no necesitamos seguir soñando. Miremos como sucede esto.
Yo he pasado por periodos en mi vida, donde por una u otra razón he tenido algún problema y he dejado de soñar. Por ejemplo, esto me sucedió recién me vi forzado a cerrar mi empresa. El mundo se vino